Blackberry, el triste final de un gigante

By on septiembre 29, 2016
Foto: Getty Images

Blackberry anunció que ya no fabricará más smartphones y que se dedicará exclusivamente al desarrollo de programas para dispositivos móviles. ¿Qué pasó para que el gigante canadiense -precursor de los teléfonos móviles inteligentes en el mundo- haya tirado la toalla? Aquí te lo contamos todo.

Escribe: Rolando Chumpitazi (con información de El País y BBC Mundo)

El teléfono se apagó. Para quien supo ser el mayor innovador tecnológico en teléfonos inteligentes, los gloriosos días han quedado muy atrás. Hoy, solo quedar vivir del pasado y redireccionar el negocio hacia nuevos horizontes. Eso es lo que ha hecho la canadiense Research In Motion (RIM), propietaria de Blackberry, siguiendo la línea trazada por su CEO, Johny Chen, quien ha decidido dejar de diseñar y fabricar teléfonos para concentrarse exclusivamente en el desarrollo de programas para dispositivos móviles.

En un mercado dominado ampliamente por Apple y Samsung -y donde cada vez la china Huawei pisa más fuerte-, varios analistas han coincidido en señalar que la suerte de Blackberry estaba echada desde hace mucho tiempo atrás.

“El derrumbe era inevitable y se veía venir desde hace años. La canadiense RIM cerró el segundo trimestre con cuentas negativas del orden de los 372 millones de dólares, superior incluso a los 334 millones de ingresos, cifra muy inferior a los 490 millones facturados en 2015”, cita, en su análisis sobre el tema, El País de España.

El derrumbe era inevitable y se veía venir desde hace años. La empresa cerró el segundo trimestre con cuentas negativas del orden de los 372 millones de dólares

En su mejor momento, Blackberry llegó a controlar la quinta parte de las ventas de móviles en 2009, uno de los mejores años de la firma. Sin embargo, y a pesar de que en julio pasado presentó el DTEK50, su último modelo con un costo de $300, no generó ningún entusiasmo. Incluso, Barack Obama, uno de los principales hinchas de la firma -y que durante su primera postulación a la Presidencia de los EE.UU. popularizó el uso de la Blackberry- decidió prescindir y cambiarse de marca.

barackberry

Cuatro hitos y un adiós

Los años de gloria para Blackberry fueron entre 2002 y 2009. No había por aquellos tiempos quien no quisiera uno de estos dispositivos con gestor de correo electrónico y navegador de internet. Tal fue su éxito que la gran mayoría de operadores telefónicos crearon planes de datos especiales para los usuarios de Blackberry.

Sin embargo, luego de un largo reinado y, por qué no decirlo, de creerse invencible, RIM cedió terreno a los iPhone (Apple) y Galaxy (Samsung), quienes con mejor tecnología y mejores precios fueron ganando más adeptos. Blackberry no supo estar a la altura del juego, y como ha sucedido con grandes marcas pioneras en su rubro -Kodak, Nokia, por citar dos ejemplos- ha decidido bajar el telón a su historia y decir adiós a quienes, alguna vez, dieron todo por tener uno de sus teléfonos en la mano.

En esta hora del adiós, recordemos los cuatro hitos más importantes en la historia de Blackberry. Y de yapa, el error que catapultó el final.

2002: el nacimiento

En marzo de 2002, se lanza en Blackberry 5810, considerado uno de los primeros smartphones en el mundo, tenia correo electrónico, navegador de internet con teclado alfanumérico, calendario, lista de tareas y reproductor de música. La pantalla era monocromática y necesitabas de audífonos para hacer las llamadas.

2005: un paso adelante

Se lanza la serie “Pearl”, que además de gestor de correo electrónico, traía reproductor de audio y video, cámara de fotos, acceso Wi-Fi y Bluetooth. Tenía pantalla a color y una tecla de navegación que facilitaba el acceso a sus diferentes funciones. Además, debutó con éxito el Blackberry Messenger, el chat que se adelantó al Whatsapp y otras aplicaciones. Una de sus usuarias más fieles por esos años (2006) fue la canciller alemana, Angela Merkel.

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2007: top of the top

Es en esta etapa que la marca alcanza su mayor fama. Y no es para menos, ya que el nuevo dispositivo posee un diseño moderno, teclado alfanumérico mejorado, pantalla a color y cámara. Durante su primera campaña presidencial, Barack Obama se dejaba ver con su “Curve”. Celebridades como Kim Kardashian eran sus usuarios más destacados, entre empresarios y estrellas de Hollywood.

Mientras Blackberry disfrutaba de las mieles del éxito y viendo a sus competidores desde la cúspide, Steve Jobs lanzaba su advertencia: “vamos a cambiar la historia de los smartphones”, en referencia al próximo lanzamiento de la primera generación del iPhone.

Nadie se imaginaba lo que vendría después. Mucho menos, en Blackberry.

2009: pantalla táctil

Con el iPhone cada día más famoso, y competidores como Sony Ericsson, Nokia, LG y Samsung, BlackBerry optó por seguir la tendencia y apostar por la pantalla táctil. El modelo “Storm” incluía sistema operativo nuevo e imitaba la idea de Apple y Nokia de tener un centro de descarga de aplicaciones.

A pesar de mantener sus ventas en crecimiento, fue la primera alerta para BlackBerry, pues las reseñas comenzaron a señalar las ventajas de los teléfonos de Apple.

2015: error y debacle

Gracias a sus modelos “Torch” y “Bold Torch”, la empresa mantuvo sus niveles de crecimiento en ventas hasta el 2011. Sin embargo, ya la mayor parte del mercado se la disputaban Samsun y Apple, cuyos equipos -Samsumg y iPhone- tenían cámaras de mejor resolución, más y mejores aplicaciones, pantallas mejor definidas y sistemas operativos más amigables para el usuario.

En un intento por acortar las distancias con sus dos competidores principales, Blackberry lanza en el 2013 su modelo “10”, con aplicaciones descargables. Sin embargo, el intento no resultó.

Dos años después, en el 2015, lanza el “Priv”, su primer smartphone con sistema operativo Android, apuesta que tampoco dio en el blanco. Las ventas no fueron lo esperado y John Chen, el presidente ejecutivo de la firma, admite que el dispositivo era muy caro.

Fue el error final y la puerta que atravesó la firma para decir adiós. Un adiós que también lamentamos todos quienes, en algún momento, disfrutamos y nos vanagloriamos de tener un Blackberry.